¿Qué es mejor? ¿Toxina botulínica, ácido hialurónico, hilos o existe algo más?
Algo que siempre nos va a mover en la búsqueda de la «eterna juventud» es tener los tratamientos estéticos «TOP» par lograrlo; sin embargo, algunos podrían causar efectos nocivos en nuestra apariencia, así como en repercusiones serias de nuestra salud. Es por ello que nos debemos enfocar en realizar optimización en cada procedimiento y con la finalidad de que se preserve la belleza y salud de nuestros pacientes. Aquí les vamos a compartir datos que hemos visto en la práctica médica, tanto como médicos estéticos como regenerativos y actualmente sumando los conocimientos del metabolismo REDOX, que amerita un artículo aparte y pronto les daremos a conocer.
Dentro de nuestra perspectiva médica y estética, la integración de los antecedentes del paciente, así como el asociar los signos del envejecimiento cutáneo, independiente de la edad, sexo u origen del mismo, dado hablar de ello incluye siempre saber los aspectos genéticos como epigenéticos de cada paciente. Esto nos da la pauta para iniciar a proyectar un adecuado protocolo que nos vaya dirigiendo a las herramientas adecuadas para proceder a integrarlas a un protocolo individual y preciso para lograr las expectativas que tiene cada paciente al pisar el consultorio médico en búsqueda de ayuda profesional.
En la actualidad contamos con demasiada información, ya no es por falta de la misma que se comenten errores, si no, más por la falta de preparación, profesionalismo de cada practicante de la medicina, sea el rubro que esté trabajando. Ahora, en nuestro consultorio, al tener en mayor experiencia con pacientes con enfermedades crónico degenerativas, en donde un producto común como lo es el ácido hialurónico, la toxina botulínica o bien hasta hilos PDO, se ven limitados si no se tiene en cuenta la oxidación que lleva cada patología, o bien ese llamado «estrés oxidativo» que tanto mencionan actualmente.
En sí, de por sí tenemos limitantes al colocarlos en pacientes aparentemente sanos, en pacientes con situaciones especiales, o crónico degenerativas, se tiene que considerar como lograr mejorar la piel, su estética facial sin comprometer más su salud. Si no, que ahora bien, todo lo que coloquemos en su piel sea tanto para mejorar la calidad de la piel, como para la optimización de su salud, que se vea beneficiada.
Existen marcadores bioquímicos que nos van a proporcionar de primera «mano» los posibles factores pro oxidantes, así como algunos que se envían a laboratorios especiales que nos proporcionan beneficios mayores si se van integrando en el rejuvenecimiento facial. Porque, ahora con nuestra experiencia y formación hemos notado que existe la posibilidad de tanto revertir el envejecimiento cutáneo, como el orgánico y como consecuencia, de manera progresiva el corporal.
Tanta maravilla no es azarosa, ni menos aplicable como si fuese una receta de cocina, si no, va acorde a factores propios del paciente como aquellos que no son dependientes de él, como lo que llaman ahora exposoma (es el medio ambiente interactuando con el individuo día a día, sea ciudad, campo, etc.); se elaboran test, pruebas que van desde las químicas convencionales hasta los genéticos y epigenéticos, en algunos casos, proteómicos, todo dependiente de cada paciente, su patología y lo que desea lograr.
En sí, hablamos de todo ello en general, porque cada uno se lleva más que un solo artículo, se tienen que considerar, dado las interacciones que tiene cada paciente con la toxina botulínica, hialurónico o hilos, va a ser dependiente de:
- como está su sistema inmunológico
- su requerimiento de antioxidantes en piel
- o bien como responderá ante ellos
Es por ello que se tienen noticias que han impactado sobre el uso excesivo de estas terapias como propuestas de mejora estética facial, en donde pocos sabrán si tuvo o no antes una revisión de parámetros bioquímicos como clínicos. Existen algunos rubros de pacientes que debe considerarse otro tipo de tratamientos, dado puede surgir alergia a algún componente o bien, ante la actualidad post COVID.
Se debe analizar con profundidad cuando colocar cada elemento, dado si se cursa con secuelas post COVID, vamos a tener que primeramente corregir ello antes de iniciar con aplicación de ácidos hialurónicos así más con la toxina botulínica, dado si hay un compromiso hepático, renal no identificado al igual que algún compromiso en nuestro sistema inmunológico, tendremos como resultado los efectos indeseados de estos tratamientos y culparemos que no funciona o bien nos hicieron daño.
Un ejemplo es que si aparte, de solicitar las analíticas sanguíneas primarias, es de que tenemos posibilidades de colocar tratamientos regenerativos que ayuden a optimizar el metabolismo redox de nuestra piel y orgánica, no limitando así obtener beneficio de embellecimiento, si no, de optimizar todo nuestro cuerpo a un aspecto más sano. La belleza es sinónimo de salud, y que más el poder potenciar todo en un solo procedimiento, a manera de que yo estoy optimizando mi envejecimiento celular orgánico, así como el aspecto de mi piel.
Todo ésto es posible si integramos todo el protocolo de embellecimiento facial de manera funcional y precisa para cada paciente; en sí, si tenemos todo esto integrado en la perspectiva médica, podemos usar las biotecnologías médicas actuales al embellecimiento de nuestros pacientes, y con ello hacer buen uso de los productos existentes que no se les resta importancia, más sin embargo ya no sobresaturo la cara o bien planos faciales con los mismos, si no, le doy una mejor armonización facial con aspecto sano, propio del paciente sin hacerle perder su identidad y sobre todo que mejoro su calidad de vida al poder ayudarle a optimizar su salud a la vez.
En Astrea, contamos con terapias avanzadas que nos han permitido darle a nuestros pacientes esa duración prolongada esperada en sus tratamientos faciales. Siempre nos estamos capacitando en nuestra formación. Aplicamos desde células madre, factores de crecimiento, plasma rico en plaquetas, exosomas así como lo más novedoso: secretomas. Así como sueroterapia, ozonoterapia, y medicina redox (mitocondrial)
Por que sabemos lo importante de la belleza, nos enfocamos a cada paciente de manera integral y personalizada para lograr tratamientos funcionales con medicina de alta precisión.