La cirugía estética en la era del selfie
La democratización de la cirugía estética es una realidad a día de hoy. ¿Sabías que una de las razones por la cual la gente se somete a este tipo de intervenciones es tener una buena imagen en las redes sociales?
Debido a la importancia que se le atribuye a la imagen en el ámbito social, no es de extrañar la aparición del fenómeno conocido como Facebook-Lifting. La tendencia comienza en los Estados Unidos a la par que en otros países europeos y ha sorprendido a los cirujanos, evidenciando un cambio en el acercamiento a la cirugía estética.
No están cambiado solo las zonas que los pacientes desean cambiar estéticamente, sino que también se modifica el modelo de referencia: antes el ejemplo a seguir lo constituían los famosos; ahora es nuestra foto de hace 10 años.
Según una investigación realizada por la American Academy of Facial Plastic and Reconstructive Surgery (AAFPRC), en los últimos meses ha aumentado en más de un 10% el número de solicitudes para operarse la cara. De hecho, más del 30% de las personas que se someten a una intervención de cirugía estética afirma haberlo hecho para mejorar su propio aspecto en las redes sociales.
Los defectos que escapaban al espejo, descubiertos por los nuevos dispositivos.
Algunos pueden pensar que someterse a una operación para mejorar su propio aspecto en las redes sociales es una idea un poco extrema. Podríamos entender que muchas personas deciden ponerse en manos de un cirujano para sentiré más atractivas en el mundo real… pero ¿en el mundo virtual? No es tan absurdo como podría parecer a simple vista.
En plena era digital estamos expuestos, más que nunca, al objetivo de una cámara (piensa que todos los nuevos dispositivos permiten hacer fotos), y nuestras imágenes se publican con frecuencia. Facebook o Instagram son algunas de las redes sociales que utilizamos para compartir nuestras experiencias con los demás y, al hacerlo, somos conscientes de lo que nos gustaría mejorar.
Aquellos pequeños defectos que no apreciamos cuando nos miramos en el espejo parecen más evidentes si los vemos en una fotografía publicada en nuestro muro de Facebook. Nuestra imagen es siempre más criticada en el ambiente 2.0:
- ¿Quieres insertar un currículum vítae en una página para buscar trabajo? Es necesaria una foto.
- ¿Estás dispuesto a probar una nueva red social? Tendrás que tener una foto, aunque sea para evitar que tu avatar sea un huevo de color morado.
- ¿Has decidido buscar pareja en páginas especializadas de internet? Necesitarás una foto que resalte tu belleza.
Relacionado con el último punto, la importancia de la imagen online es tal que el 95% que decide contactar con alguien lo hace en base a su imagen. "Nos guste o no, nuestro aspecto es importante, no existe otro modo de provocar una primera impresión", afirma el experto en imagen personal y famoso matchmaker Paul C. Brunson. No ayuda tampoco el formato de videoconferencia como Skype o Facetime. Ni la luz ni el ángulo del dispositivo favorecen; todo lo contrario, acentúan defectos como arrugas, ojeras, bolsas en los ojos…
Las intervenciones más populares de cirugía estética
El tan deseado efecto Benjamin Button es aquel que buscamos con más frecuencia. La tendencia del Facebook-Lift no explica por qué nos sometemos a una operación de cirugía estética, pero aporta información sobre los tipos de intervenciones más frecuentes.
Las mujeres que se someten a una operación de cirugía estética para mejorar su propio aspecto, lo hacen para corregir lo siguiente:
- Papada
- Pequeñas arrugas
- Ojeras, bolsas
- La caída del labio
Según la AAFPRC, las intervenciones que encabezan el ranking, sobre todo en lo que respecta a pacientes menores de 30 años, son las siguientes:
- Lifting
- Toxina botulínica
- Rinoplastia
Es necesario apuntar que el género masculino también se preocupa de su aspecto, sobre todo en lo referente al ámbito laboral. Un estudio del California Pacific Medical Center revela un incremento del 27% respecto al número de hombres que se someten a la cirugía. La rinoplastia, la blefaroplastia (que rejuvenece los párpados) y la inyección de ácido hialurónico son algunas de las operaciones más demandadas.